Cuantos esfuerzos realizados solo por un momento tan fugaz como espasmódico, tan insustancial como vacío. Me refiero al orgasmo aunque bien podría tratarse de la vida
***
Acostarse por la noche desando tener un sueño por el que merezca la pena despertarse
***
La belleza como problema comunicativo
***
Hablo tanto conmigo mismo que a veces pierdo el gusto de hacerlo con los demás
***
Deseamos con tanta ansia ese encuentro inesperado capaz de cambiar nuestras vidas que cuando sucede todo sigue igual que estaba
***
No me escuchas porque de mi boca no salen las palabras, pero igual yo te hablo como si lo pudieras hacer
***
El capitalismo cambio el ser o no ser por el tener o no tener. ¡He ahí la cuestión!
***
Perderte fue una tragedia tan grande como lo hubiera sido tenerte y no poder haber escrito estas palabras
***
Siempre preferiré las conversaciones con mujeres así como los libros escritos por hombres
***
A veces me pregunto si alguien me lee; yo mismo me respondo: sí, tú
***
El saber si ocupa lugar, sino que le pregunten a mi pobre memoria
***
Me dices que tu corazón pertenece a otro. Iluso de mí, yo pensaba que tu corazón era tuyo
***
Las mujeres nunca ostentarán el poder; son demasiado inteligentes como para hacer semejante estupidez
***
Cuando me abandonó me dijo que jamas encontraría a una mujer que me quisiera tanto como ella lo había hecho. Enseguida entendí que, por sus palabras, ella jamas encontraría a un hombre al que quisiera tanto como a mí. ¡Ojala!, respondí
***
Jose Manuel Lucas
No acabas de sorprenderme; te creía un pasota y eres un auténtico filósofo que escribe sobre lo que medita. Me gustan mucho tus Tarascadas.
ResponderEliminarConchita, tu siempre tan amable; y, sí, soy pasota por naturaleza (y necesidad), si no, no sé que hubiera sido de mi... Saludos desde Estambul.
ResponderEliminar